Los Peugeot Bébé fabricados en Francia a partir de finales de 1912, son unos coches con una gran técnica, sencillos, pequeños, agiles y baratos entre sus virtudes.
Basado en su predecesor, el Tipo 12. Dispone de un motor de 55 x 90 (855 c.c.) de válvulas laterales, embrague de cono de cuero y dos velocidades (Bugatti construyó su prototipo con la posibilidad de utilizar un cambio de cuatro o cinco velocidades. Peugeot lo sacó al mercado simplemente con dos marchas aunque posteriormente le puso una tercera velocidad, siendo la suspensión trasera por medio de 1/4 de ballesta al revés. Bugatti vendió su patente a Peugeot mediante un contrato firmado el 16 de noviembre de 1911.
Bugatti describió en el contrato los siguientes datos: Bébé, 10 cv. a 2.000 r.p.m. 80 km./h.. Todo un ejemplar de este coche, incluido su motor, fue construido por Bugatti en su taller de Molsheim, antes de vender su patente. En octubre de 1912, es presentado en el Salón de París como la védete del stand Peugeot, donde fueron muchos los interesados en este nuevo automóvil.
Durante el año 1913, los responsables de Peugeot, siempre interesados en la publicidad que reportan las carreras, deciden hacer debutar a tres Bébé en competición, eligiendo el circuito de La Sarthe. No logran imponerse al rápido Violet, un coche concebido exclusivamente para la competición, pero logran las meritorias 2, 4 y 5 plaza en su categoría. Un mes más tarde, otro Bébé conducido por Gehim, vence su clase en la Subida en Cuesta a Mont-Ventoux. Peugeot con estos resultados dará por finalizada la participación en competición, centrándose su departamento de carreras, en exclusiva a partir de este año, en el coche de carreras L76 con doble árbol de levas en cabeza y que dio tantos éxitos a la marca en su vida deportiva.
Con la llegada de la Primera Gran Guerra, las fábricas más importantes de Francia, tuvieron que cambiar sus programas de producción, dejando prácticamente sus proyectos sin acabar y centrándose en la producción de material militar.
Antes de su cese de fabricación en 1916, los Bébé demostraron de nuevo su fiabilidad y maniobrabilidad al tener parte activa en la contienda, pues fueron empleados por el ejército francés como coche de enlace en diferentes frentes de campaña.
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